El Ajuntament de Palma aprobó este miércoles el pago de 98.000 euros al propietario de un local 49 metros cuadrados de la escalera urbana que comunica la Plaça del Mercat con la Plaça Major, también conocida como la Costa del Teatre.
Era el último trámite de un largo procedimiento de expropiación forzosa que ha afectado a otras seis casetas de madera con más de 150 años de antigüedad y que, antes, formaron parte de los puestos del mercado.
Aunque el objeto de la expropiación es reforzar el carácter viario de la zona, el teniente de alcalde y portavoz del ejecutivo municipal, Julio Martínez, afirmó que dadas las peculiaridades del enclave se analizará ahora si es posible completar el uso urbano con algún otro comercial, cultural o lúdico.
El proceso de expropiación se inició en la década de los noventa, cuando Joan Fageda era alcalde.