Los trabajos para la interconexión eléctrica entre Eivissa y Mallorca avanza a buen ritmo y será una realidad a finales de 2015. Este lunes finalizaron las tareas del tendido del primero de los dos cables submarinos entre las dos islas.
Comenzaron el pasado 27 de noviembre en la bahía de Talamanca en Eivissa y han concluido en Santa Ponça. Está previsto que en quince días comience el tendido del segundo cable, cuyos trabajos se iniciarán en la playa calvianera.
El barco noruego ‘Skagerrak' se ha encargado de los trabajos del proyecto, denominado Rómulo 2, cuya inversión por parte de Red Eléctrica asciende a 225 millones de euros.
El objetivo es garantizar la estabilidad y calidad de suministro de las Pitiüses y solucionar el aislamiento energético de las Islas, uniendo los dos sistemas eléctricos existentes (Mallorca-Menorca y Eivissa-Formentera).
La interconexión eléctrica entre Mallorca y Eivissa consta de un doble enlace submarino de 132 kilovoltios en corriente alterna. Con una longitud de 126 kilómetros, cada circuito constará de dos cables tripolares con fibra óptica integrada.
El tramo submarino del enlace, de 118 kilómetros, será el más largo del mundo en corriente alterna y el más profundo dentro de su categoría, al discurrir por fondos marinos de hasta 800 metros.