La Unión Europea (UE) podría reclamar los 12 millones que aportó para la implantación del sistema de recogida de basuras en el centro de Palma, cuyo coste ascendió a 26 millones. La Fiscalía Anticorrupción estudia una serie de irregularidades, como el pago de trabajos que no se han realizado y otros que se han abonado dos veces, entre otros asuntos. El sistema de recogida quedó fuera de servicio a los 10 años, 20 antes de lo previsto.
El socialista Andreu Alcover, miembro del consejo de Administración de Emaya, explica que si hay condenas por corrupción o la empresa municipal le gana el pleito a Envac por el colapso del sistema, la UE sí podría exigir la devolución de los 12 millones.
Andreu Garau, presidente de Emaya, se muestra «sorprendido» por la «sobrerreacción» que han tenido dirigentes del PP, como José María Rodríguez y Álvaro Gijón, y precisó que han demandado a la instaladora y no a los políticos. Añade que en el caso de que hubiese corrupción serían los que han malversado el dinero público los que deberían devolverlo.