Un ejemplar hembra de un año de vida de águila perdicera ha sido liberado en el Parque Natural de Levante, para contribuir a alcanzar el objetivo de garantizar la reproducción y conservación de esta especie mediterránea en Mallorca, gracias al proyecto Life Bonelli de la Unión Europea.
El ejemplar, llamado Daimiel, fue marcado cuando estaba en el nido, en una cordillera de Toledo, con un emisor vía satélite, informa la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio.
Este emisor permitió identificarla cuando fue herida por un disparo en un ala en su proceso de migración hacia el sur.
Y cuando era trasladaba al centro de Recuperación de Granada sufrió un accidente dentro de la jaula donde se recuperaba y se rompió las piernas.
Después de un año de tratamiento y gracias a la actuación de la asociación GREFA (Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat), Daimiel ya se encuentra recuperada y preparada para sobrevivir en libertad.
Con esta liberación ya se han reintroducido 22 ejemplares de águila perdicera en Mallorca desde 2011, en el marco de colaboración entre el Govern y la compañía Red Eléctrica de España.
De las 14 águilas perdiceras que han sobrevivido, ya se han formado dos parejas y ha flotado un piojo.
El resto han muerto, bien porque no se han adaptado a la vida silvestre o por otras causas.
El Plan de Reintroducción del Águila Perdicera en Mallorca se puso en marcha en 2009 para conseguir que entre diez y quince parejas reproductoras nidifiquen en la Sierra de Tramuntana en un plazo de diez años, lo que garantizará la conservación de esta especie mediterránea en Mallorca.
Este Plan, lo coordina la Dirección General de Medio Natural de la Conselleria de Agricultura y lo ejecuta el Consorcio para la Recuperación de la Fauna de las Islas Baleares (COFIB), gracias al programa Life Bonelli, con la colaboración del Instituto Balear de la Naturaleza (IBANAT), varias ONG, las comunidades autónomas de Andalucía y Madrid, la Fundación Natura Parc y voluntarios que participan en el seguimiento y la vigilancia de las aves.
También colaboran Vinyes Mortitx y La Reserva Puig de Galatzó.