El único hotel nudista en Balears, el Naturplaya, que apostó por reconvertir el establecimiento de junio a octubre para uso naturista, ha logrado en su segundo año duplicar la ocupación por la gran demanda que hay por este segmento vacacional.
Alvaro Segura, su director, puntualiza que en la primera temporada «operamos para ver cómo se podía funcionar y no fue mal de todo. Pero en 2014, hemos duplicado la ocupación, ya que hemos pasado del 30% al 70%, gracias al mercado alemán, francés, holandés, belga, croata, polaco o checo, que son los que demandan el turismo naturista. Y para nuestra sorpresa, hasta nos han llegado clientes de Corea del Sur y Australia».
El hotel, englobado en la Federación Española de Naturismo y el International Naturist Federation (INF) está teniendo una gran aceptación por su privilegiada situación, próximo a Sa Canova de Artà, y por la tranquilidad del entorno.
«La estancia media es de dos semanas en régimen de media pensión, con un coste medio que oscila entre los 1.200 y 1.600 euros. Nuestros clientes son parejas que buscan unas vacaciones relajadas y en un ambiente naturista».
Pese a lo que pueda parecer, no todas las zonas del hotel son naturistas, ya que en los restaurantes y la recepción es obligado llevar ropa, por una cuestión de higiene, no así en la playa, piscina o jardines.
Los ratios de calidad en tan solo un año de operatividad son altos, ya que los comparadores on-line de calidad lo sitúan entre 7 y 8, de diez puntos.
Demanda
Segura añade que Mallorca puede ser un gran destino naturista, «porque cuenta con una oferta de playas naturistas muy buenas y solo faltaba disponer de un hotel especializado para este mercado, que está en alza en Europa».
La edad media de los turistas oscila entre los 50 y 55 años en un 60%, aunque hay de todas las edades. El poder adquisitivo es medio-alto.