«Los negocios del sector turístico no soy muy rentables en estos momentos en España». Así lo aseguró ayer el presidente de la Federación Hotelera de Mallorca (FEHM), Aurelio Vázquez, quien presentó en Madrid el Régimen Especial para Alojamientos Turísticos (REAT). Se trata de un paquete de 50 medidas fiscales, laborales, financieras y administrativas con el fin de mejorar la rentabilidad del sector turístico y, a la vez, conseguir una mayor competitividad, y que están dirigidas al Gobierno de Mariano Rajoy.
Vázquez defendió un modelo turístico que pasa por primar la calidad en vez de la cantidad de turistas. En este sentido, lamentó que el incremento de 15 millones de visitantes internacionales en los últimos 13 años no se ha traducido en un aumento de la ocupación hotelera.
«Traje a medida»
El bufete Cremades&Calvo Sotelo ha sido el encargado de asesorar a la FEHM en la elaboración del paquete de medidas, el cual, su presidente, Javier Cremades, definió como un «traje a medida para el sector turístico porque el suyo se ha quedado pequeño y un ajuste y una discriminación quizás sea necesario». Sin embargo, declinaron hablar de «privilegios» fiscales, al entender que se trata de un conjunto de medidas para que España «lidere el cambio en el sector turístico y crear una oferta nueva».
Los hoteleros reclaman no estar sujetos al impuesto sobre transmisiones patrimoniales así como reducciones del 100 % en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones para favorecer el relevo generacional y la inversión extranjera en el sector. Además de un IVA superreducido, «una promesa no cumplida», también solicitan deducciones del impuesto de sociedades para regenerar zonas maduras ya que «la inversión vendrá de la iniciativa privada dado que no hay dinero público». Aún así, piden la creación de un fondo regional para la regeneración de zonas turística maduras.
Vázquez criticó la presión fiscal a la que está sometida el sector y aseguró que un 22 % de los beneficios de la actividad hotelera se destinan a pagar impuestos. Por ese motivo, la finalidad de las medidas que reclaman al Gobierno es una reducción de la carga impositiva, como una bonificación del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
Ahora la FEHM presentará el documento a diferentes departamentos del Gobierno, así como al resto de patronales hoteleras.