La Conselleria d'Educació ha remitido a la mayor parte de los centros de Secundaria de las Islas una propuesta de reducción de unidades (aulas) de cara al próximo curso escolar. Esta eliminación de grupos conllevaría, lógicamente, el aumento de ratios en el resto de clases, algo que en según que institutos públicos resultaría inviable, incluso físicamente hablando.
Es cierto que los directores de los centros educativos debían realizar alegaciones a esta propuesta, pero a día de ayer, fecha en la que la Conselleria debía contestar a estas enmiendas, pocos centros recibieron una respuesta, por lo que está por saberse hasta qué punto Educació esta dispuesta a llevar adelante esta iniciativa.
La Conselleria d´Educacio´podría aumentar las ratios (número de alumnos por aula) hasta los 36 alumnos en ESO -donde ahora hay 30 o 31- y los 40 en Bachillerato -aquí la media depende mucho de la modalidad-, pues así lo permite la nueva ley educativa.
Según cálculos meramente estimativos suprimir un aula de Secundaria implica una media de tres profesores menos y algunos docentes piensan que estos profesores podrían ser destinados a labores de refuerzo del TIL.
En cualquier caso, desde las mismas fuentes docentes se lamentó que desde la Conselleria no se haya consultado en ningún momento las necesidades de los centros, ni se les haya solicitado su opinión.
Por otro lado, los centros tienen aún pendiente elaborar los proyectos lingüísticos de cara al próximo curso adaptados a la orden de desarrollo del TIL, que todavía no ha pasado por el trámite del Consultiu.