Cientos de personas participaron ayer en una protesta contra las prospecciones petrolíferas en el Mediterráneo. La movilización, algo dispersa, estuvo convocada por la Plataforma de Veïnats i Comerciants Platja de Palma-Llucmajor y la Real Liga Naval Española, entre los balnearios 4 y 8 de la Platja de Palma. Durante algo más de una hora, los manifestantes formaron una cadena humana para representar una ‘marea negra'.
En el mar, varias embarcaciones se sumaron a la protesta simulando la contención de un ‘chapapote' en la costa mallorquina. Batucadas, dimonis, cartulinas negras, trozos de plástico y demás utensilios llamaron poderosamente la atención de los turistas que disfrutaban de la playa. Algunos tomaban fotografías, otros se sumaron a la cadena humana. El capitán de yate y portavoz de la Real Liga Naval Española, Juan Fullana, destacó la importancia de preservar el mar: «La defensa de la pesca, la marina deportiva y también científica, como parte de nuestra vida en una isla», dijo.
Coherencia
Enrique Salvà, portavoz de la plataforma de vecinos y comerciantes de la zona, aseguró que «el rechazo es unánime. Hasta los extranjeros han aplaudido esta protesta». Entre las personas que se sumaron a la ‘marea negra' se encontraba Jaume Font, presidente del PI. «No entiendo la irresponsabilidad de la gente, que teniendo raíces en esta tierra pueden dar apoyo a esta iniciativa. Aunque digan que viene de arriba, precisamente, que caiga», afirmó.
«¿Cómo es posible que la UE desde 1999 al 2006 se preocupe de declarar kilómetros de zonas protegidas, especialmente en las praderas de posidonia? ¿Ahora, y justo anexas a estas zonas LIC (Lugares de Importancia Comunitaria) quieren hacer prospecciones petrolíferas? Esto es una locura», dijo Font, quien lamentó la falta de diálogo y consenso entre los gobiernos de Balears y Madrid.
El vicepresidente del PI, Pep Melià, junto con la presidenta de la Junta Local del PI de Llucmajor, Joana Xamena, expresaron su total apoyo a la campaña medioambiental y expresaron su preocupación por poner en jaque el motor de la industria en las Islas como es el turismo y la conservación de la naturaleza.