A partir del próximo mes de otoño es muy probable que quienes vayan al monte a recoger setas o caracoles tengan que pagar una tasa ya sea por acceder a las fincas donde se encuentran estos productos ya sea por recogerlos directamente del terreno. Lo mismo cabe decirse de quienes vayan a recoger espárragos, plantas aromáticas, medicinales, resinas, cortezas, productos apícolas, pastos, frutos, trufas o cualquier otro productos micológico.
La Llei Agraria, sobre la que ya hace meses que trabaja la Conselleria de Biel Company, permitirá a los propietarios de fincas rústicas o de explotaciones agrarias crear vedados de recogida de todos estos productos. Estos vedados le autorizarán bien a vender directamente el producto a los distribuidores o en su finca, bien cobrar un peaje a quienes accedan a la finca o una tasa por la recogida específica de estos productos.
Novedad
Se trata de una novedad importante ya que hasta la fecha esta actividad no está regulada. La ley fija que al declaración de un vedado no es obligatoria, pero sí será necesaria sí se quiere obtener este tipo de aprovechamiento de los recursos naturales. El anteproyecto de ley determina además que los vedados de recursos silvestres podrán ser objeto de uso recreativo a comercial, incluyendo el arrendamiento.
Los propietarios que lo deseen deberán solicitar al Govern le declaración del vedado y será el Ejecutivo quien decida hasta qué punto se puede aprobar el aprovechamiento económico de la finca en función del grado de protección de la zona en la que se encuentre.
Los vedados quedarán señalizados en su perímetro exterior, en las entradas por carreteras, caminos vecinales y pistas forestales. El proyecto de ley especifica, en cualquier caso, que la gestión de los recursos silvestres de los vedados «se realizará de acuerdo con las buenas prácticas agrarias y ambientales, según la costumbre o el uso del lugar».
Además de la posibilidad de crear vedados, el anteproyecto de ley también incorpora la creación de reservas en las que no se podrán realizar los aprovechamientos de los productos naturales. En las reservas de recursos silvestres «queda suprimido todo tipo de aprovechamiento de los recursos silvestres con carácter permanente, salvo autorización de la Administración ambiental por motivos de interés público debidamente acreditado».
Concesiones
El proyecto incorpora además otra importante novedad: los aprovechamientos forestales de cualquier clase, en fincas o explotaciones que sean propiedad de las administraciones públicas, podrán salir a concesión. Es decir, que Govern, Consell y ayuntamientos podrán ‘alquilar' el uso de sus fincas a un tercero para sus correcta explotación sostenible, según recoge el anteproyecto de ley que se presentará en breve.
El Govern también obtendrá ingresos con esta nueva legislación ya que, además de sacar a concesión el aprovechamiento de sus fincas, cobrará una tasa de aquellos propietarios que decidan crear vedados micológicos o de caracoles en sus terrenos.