El Govern se muestra convencido de que no tendrá que devolver los 30 millones de euros del llamado céntimo sanitario que cobró en el año 2012. Los tribunales europeos están a punto de anular este impuesto y es probable que mañana mismo se conozca la sentencia que invalida un recargo al impuesto de hidrocarburos.
El abogado de la Unión Europea ya presentó un primer escrito hace cuatro meses en el que consideraba ilegal este recargo que cobraban diversas comunidades autónomas, entre ellas Balears. El abogado aseguraba que aplicar un recargo finalista contraviene la legislación europea y por ello propone que se anule.
El caso de Balears
Balears puso en marcha este nuevo impuesto, el llamado céntimo sanitario, en 2012 y comenzó a recaudarse el 1 de mayo de ese año. El impuesto llegó hasta diciembre y dejó de aplicarse el 1 de enero de 2013. De hecho, dejó de llamarse céntimo sanitario y pasó a ser un simple recargo sobre el impuesto de hidrocarburos. Se sigue cobrando desde entonces y vuelve a aparecer en los Presupuestos del Govern para el año 2014.
El Gobierno y las comunidades autónomas ya estaban advertidas de que la sentencia del tribunal europeo sería desfavorable y de ahí que el impuesto quedara sin efecto desde el 1 de enero de 2013.
Fuentes del Govern insisten que no temen que la sentencia implique tener que devolver esos 30 millones de euros que se recaudaron en 2013. En cualquier caso, también aseguran que se trata de un problema que deberán resolver de forma conjunta las comunidades autónomas y el Gobierno central ya que, de hecho, fue el Gobierno quien autorizó el cobro de este tributo.
Devolución
El Govern prefiere no hacer cábalas sobre el contenido de la sentencia hasta que no se conozca la letra pequeña. Como es obvio, la duda fundamental está en si se exigirá o no la devolución del dinero cobrado con este impuesto, que en el caso de Balears es una minucia comparado con la cuantía de otras comunidades autónomas. Algunas, de hecho, lo cobran desde que se autorizó, en el año 2002.
En caso de que la sentencia obligue a la devolución del impuesto, es imposible que el dinero llegue a los ciudadanos de Balears, que son quienes lo han pagado. Las 'recaudadoras' del impuesto eran las gasolineras y los cálculos se hacían en función de la provisión anual de gasolina. Es decir: las gasolineras han pagado el Gobierno central, que ha su vez ha revertido el céntimo sanitario a las comunidades autonómicas.