El Stei-i no se esconde: «El Govern es el que politiza el conflicto educativo, pero nosotros somos un sindicato socio-político y entre nuestras obligaciones está la de informar a la ciudadanía para que entienda de dónde viene el caos que vive la educación, que tome conciencia de los ataques a las libertades y derechos por parte de este Govern, para a continuación reaccionar», apuntó Maria Antònia Font. Todos estos «momentos, decisiones o actuaciones» del Govern que pisan la educación han quedado recogidos en el 'Informe Trepitja' que el sindicato ha elaborado -ha editado un millar de ejemplares- y distribuido por los centros educativos.
El informe recoge sospechas y hechos concretos que llevan al sindicato a concluir que el Govern pisa los derechos lingüísticos de los catalanoparlantes, la profesionalidad del sector docente, la unidad de la lengua catalana y el derecho a la huelga. También se pisa la autonomía de los consells escolares, la negociación, las sentencias judiciales, la libre voluntad de los manifestantes y la autonomía de los equipos directivos. Por último, se acusa a Educació de pisar la normativa educativa estatal, el derecho a la libre elección de lengua, las recomendaciones del Consell Consultiu, la pluralidad informativa e, incluso, su propio programa electoral.
Pese a todo, Font aseguró que «nunca hemos dado por cerrado el diálogo con la Conselleria d'Educació».
Bauza, abordado
De momento, CCOO se adelantó y ayer abordó al presidente Bauzá a su llegada al pleno del Parlament para solicitarle una reunión para tratar de desbloquear la situación. Toni Baos lamentó que «en principio contestó que no lo descarta, pero cuando le hemos pedido que lo ponga en su agenda ha dicho que no, que con quien nos hemos de reunir en con la consellera Camps».