Trabajadores de la cárcel de Palma se han concentrado este martes para pedir la paralización inmediata del proceso de privatización y a favor del mantenimiento de un modelo público de Instituciones Penitenciarias.
La representante de CCOO en la prisión de Palma, Marisa Sánchez, ha explicado que el «desmantelamiento» de Instituciones Penitenciarias como servicio público se está llevando a cabo a través de «no convocar oferta pública de ocupación» y, de esta manera, poder justificar el mal funcionamiento de los centros y proponer su privatización.
Sánchez ha considerado que faltan empleados públicos para garantizar el correcto desarrollo de este servicio público y ha reclamado que se aborde el déficit estructural de personal «agudizado» por la falta de oferta pública de ocupación y la inexistencia de tasa de reposición y el envejecimiento de la plantilla.
«La plantilla es de cada vez más escasa y la media de edad más alta», ha señalado Sánchez, quien ha añadido que sin trabajadores no se pueden desarrollar los preceptos constitucionales, ni garantizar la custodia de los internos, algo que «afectará gravemente la seguridad de los empleados públicos penitenciarios», ha opinado.
Asimismo, ha exigido la paralización inmediata del proceso de privatización de Instituciones Penitenciarias iniciado con la seguridad exterior. «Ya hay vigilantes privados haciendo funciones de vigilancia externa del centro, acompañados de un guardia civil, de forma experimental por un periodo de seis meses», ha manifestado.
Finalmente, ha remarcado que este modelo de Instituciones Penitenciarias privado «es ajeno» al modelo social y democrático «que queremos que continúe».