El exministro de Asuntos Exteriores alemán, Guido Westerwelle agradeció ayer en el hotel Castillo Son Vida, donde tuvo lugar la entrega de la Medalla de Oro del Fomento del Turismo de Mallorca, el galardón, el cual calificó de un «gran honor y una gran satisfacción personal por lo que representa, más en concreto porque Mallorca es, desde mi infancia, un destino turístico formidable que he convertido en algo parecido a una segunda patria».
Westerwelle, que ha sido premiado por el Fomento por su defensa de la imagen turística de la Isla, afirmó en castellano que «estaré ligado con mi corazón a esta Isla, en la que he vivido momentos muy especiales».
Reconocimiento
El acto, que contó con la presencia del president Bauzá y representantes del sector turístico balear, entre ellos el conseller Jaime Martínez, y del alcalde de Palma, Mateu Isern, y el conseller de Presidència del Consell, Jaime Juan, sirvió para reconocer la labor del exministro alemán.
Así, el presidente del Fomento, Eduardo Gamero, resaltó el hecho de que comprara una casa en Mallorca y su defensa a ultranza de la Isla. El president Bauzá destacó la influencia de Guido Westerwelle para que Palma fuera la sede de la cumbre de ministros de Exteriores de la UE en julio pasado.
«Ayudó, además, a eliminar cualquier duda o suspicacia de algún medio de comunicación que no dejaba al pabellón balear como toca en cuanto a sus servicios, prestaciones y turismo en general», afirmó el president.