El president del Govern, José Ramón Bauzá, aseguró ayer que la creación de empleo será su prioridad para 2014 y que seguirá reclamando «un trato más justo» al Gobierno de Madrid.
El president, en su discurso de fin de año, vinculó la creación de empleo a los buenos resultados de la temporada turística.
«Todo hace pensar -dijo. que la próxima temporada turística será igual o mejor que la del año que ahora finaliza. Ello debe repercutir en la generación de empleo, y debería repercutir más que en temporadas anteriores. El objetivo de crear empleo nos debe implicar a todos. De tal forma que si la temporada va bien, nos vaya bien a todos».
Servicios públicos
Bauzá, durante una intervención de poco más de seis minutos -en su despacho de trabajo del Consolat y, en su mayor parte, con el fondo de una estantería con libros y regalos protocolarios que se hacen a la Comunitat- , el president se esforzó por transmitir el mensaje de que la política seguida hasta ahora era la adecuada. Bauzá aseguró que el Govern que presido «va a seguir trabajando sin descanso» y que «la recuperación no será fruto de ningún milagro, sino del trabajo bien hecho».
Según el president, que defendió el equilibrio presupuestario como una de las claves de la austeridad, «no es ahora el momento» de repasar lo realizado por el Ejecutivo ya que «hace poco celebramos el debate de política general en el Parlament»
Con esa premisa, a lo largo de su intervención, eludió cualquiera de los temas polémicos que han marcado este año, entre ellos el conflicto educativo que sacó a la calle a más de cien mil personas. Si dijo que, además, de empleo había que consolidar los servicios públicos y que para eso era indispensable «consolidar la recuperación y volver a la senda del crecimiento».
El president admitió, eso sí, que 2013 había sido «otro año difícil» pero que «avanzamos hacia la recuperación» . Además de señalar que ésta no será frutro de un milagro, apeló a la «paciencia». Lo hizo por boca del beato Ramon Llull que, recordó, dejó escrito que «la paciencia empieza con lágrimas y, al final, sonríe».
Bauzá se despidió mostrando su disposición a seguir trabajando «incansablemente» por Balears.