El juez instructor de la 'operación Relámpago', Antoni Garcías, ha fijado una fianza de responsabilidad civil de 45,8 millones de euros a seis acusados en una de las piezas separadas de la causa, que se investiga desde 2007, y que será juzgada por la Audiencia de Palma.
En el auto, el juez impone al ciudadano británico Peter Brian Bradley una caución de 15 millones de euros, y de otros 22 millones al abogado Alejandro Feliu, ambos por tres delitos contra la Hacienda Pública.
El notario Alberto Herrán, también acusado por un delito de blanqueo de capitales por imprudencia grave, tendrá que depositar 2,6 millones de euros.
Bradley, el principal acusado, se encuentra en padadero desconocido tras cumplir una condena de cárcel en el Reino Unido.
Herrán, por su parte, habría cometido el delito de blanqueo de capitales por imprudencia por su participación en la escritura pública de constitución de la sociedad Bell Brogit S.L., y luego en la adquisición del inmueble. «Herrán no cumplió con sus obligaciones, ya que conocía que la sociedad española estaba participada por dos sociedades mercantiles panameñas que ocultaban al titular de las mismas, y autorizó la escritura de adquisición del inmueble por precio documentado de 1.850.000 euros», señala el auto del juez.
La Fiscalía Anticorrupción pide para Herrán una pena de 16 meses de cárcel. El titular del Juzgado de Instrucción 7 de Palma señala en su resolución que «se ha comprobado mediante documentación pública y privada la realización de las operaciones inmobiliarias y la constitución y participación de las sociedades mercantiles nacionales y extranjeras, fundamentalmente de países declarados como paraísos fiscales, que provenían de actividades delictivas».
El magistrado señala que mantiene la medida cautelar de orden personal de los acusados, aunque matiza que las incomparecencias de Bradley «puede hacer variar su situación».