«Cada día detectamos en España cuatro millones de ataques a las infraestructuras de servicios críticos», aseguró ayer en Palma el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, que clausuró una reunión del Centro de Coordinación Antiterrorista Europeo en el que participaron expertos de todos los países miembros de la Unión Europea, además de Estados Unidos, Australia y de la Unión Africana.
Martínez reconoció que la mayoría de estos ataques cibernéticos -que se controlan desde un centro ubicado en León- «son inocuos» y afectan a servicios tanto públicos como privados, en especial entidades financieras «a las que se avisa de inmediato para que adopten las medidas pertinentes».
El secretario de Estado, que mantuvo una breve reunión de trabajo con la consellera de Administracions Públiques, Núria Riera, en la sede de la Delegación del Gobierno, reconoció que «las ciberamenazas son un fenómeno nuevo y del que hay que tomar conciencia de que son un desafío a la seguridad». En este sentido señaló que el ciberterrorismo centró en buena medida la agenda de los cumbre de expertos que ha tenido lugar en Palma durante dos días.
El espionaje
«No hemos hablado de espionaje», aseguró Martínez cuando se le planteó la polémica sobre las escuchas telefónicas de Estados Unidos a líderes occidentales y de millones de ciudadanos. Sobre este punto insistió en que «el tema central de estas jornadas ha sido el ciberterrorismo», admitiendo al final que «la información siempre es útil en la lucha contra el terrorismo».
Sobre esta última cuestión, Martínez advirtió que «las zonas del Sahel y Siria son los más preocupantes como posibles focos de grupo radicales, pero también preocupan la acción de 'lobos solitarios'».