Tras horas de negociación, el gobierno de Mateo Isern se negó ayer a instar sólo al Govern a negociar una salida al conflicto del TIL y incluyó también al comité de huelga y la comunidad educativa para que se impliquen en el diálogo. El alcalde lamentó que no fuese posible llegar a un entendimiento y la oposición lo acusó de obedecer al president José Ramón Bauzá. «Isern ha tenido la posibilidad de escuchar a los ciudadanos y ha primado permanecer al lado de Bauzá como en Ses Voltes», manifestó el portavoz de Més, Antoni Verger. En términos similares se expresó la portavoz del PSOE, Aina Calvo, que aseguró que «Bauzá e Isern representan lo mismo, los dos estaban juntos en ses Voltes», donde el PP de Palma celebró un acto el pasado viernes. La socialista también culpó a la regidora y consellera de Benestar Social, Sandra Fernández, «que validó el TIL en el Parlament y forma parte de esa posición más radical».
El portavoz del PP, Julio Martínez, negó la existencia de presiones del partido y justificó el voto en contra porque entienden que se tiene que instar a negociar a todas las partes y «la oposición lo que quería es atacar a Bauzá». Martínez explicó que sí aceptaron la propuesta que realizó la asociación la Defensa de instar a negociar al Govern con la comunidad educativa porque «partía de una entidad ciudadana», pero la oposición la rechazó y comenzaron la negociación de cero.
Finalmente, el pleno aprobó con el rechazo de la oposición «instar a la Conselleria d'Educació, a la comunidad educativa y a los sindicatos a seguir dialogando para conseguir entre todos la mejora del sistema educativo y potenciar la formación lingüística de los estudiantes» y «conseguir que los alumnos acaben la educación obligatoria con la competencia lingüística necesaria en las dos lenguas oficiales y el inglés, garantizando el equilibrio entre las dos lenguas».
Durante el pleno hubo numerosas intervenciones, en las que le pidieron a Isern que intermedie ante Bauzá para que retire el TIL. Una de las más aplaudidas fue la de Laura Calafell, que en nombre de la Assemblea de Docents le preguntó al alcalde: «¿Dónde ha estado usted durante estos días?» Y le recriminó que 32 ayuntamientos ya han dicho no al TIL. La portavoz del STEI-i, Maria Antònia Font, también acusó a Bauzá de llevar dos años tomando medidas contra el catalán.