La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Mallorca ha pedido a la Defensora del Pueblo, Soledad Beceril, su mediación en el conflicto educativo balear, con una huelga convocada al inicio del curso, «con la esperanza de que pueda consensuar acuerdos entre las partes».
En comunicado destaca «los más de 1.500 padres y madres que han asistido a las asambleas informativas convocadas por la FAPA de Mallorca estos dos últimos días».
«Ante este caos sin precedentes las familias han demostrado su responsabilidad con una participación extraordinaria, haciendo patente que compartimos con los docentes las motivaciones de la huelga indefinida», añade.
LA FAPA hace responsable de la situación a la Consellería de Educación «por no haber sabido recoger las propuestas de toda la comunidad educativa, encendiendo aún más la llama de la discordia con actuaciones prepotentes y llegando a la imposición de un decreto-ley vergonzante» para aplicar el Tratamiento Integrado de Lenguas.
La federación está elaborando un «compendio de herramientas» con todas las propuestas de acciones que se han sugerido en las asambleas informativas para que sus socios y cualquier persona que sea «sensible» a la situación puedan «poner su granito de arena y haga algo para poner de manifiesto la preocupación por la huelga indefinida».
Entre las acciones se propone la presentación de recursos de alzada contra la vulneración de los proyectos que no hayan pasado por la aprobación de los consejos escolares e incluso la petición de dimisión de la consellera por parte de estos órganos.
«La intención es presionar a la Consellería y al Govern para que abran una negociación seria, abandonen este estilo de gobierno y lleguen a algún consenso con los convocantes de la huelga», explica la FAPA.
Asegura que quiere que la huelga sea lo más corta posible y por eso ha reclamado la mediación de la Defensora del Pueblo.