El ayuntamiento de Palma es, con diferencia, el más endeudado de Balears según se desprende del informe de fiscalización a doce consistorios con una población superior a 20.000 habitantes que ha hecho público la Sindicatura de Cuentas.
El informe, que recoge una radiografía municipal del estado de cuentas en que los municipios afrontaron la actual legislatura, parte de los datos de 2010, año electoral, y efectúa un diagnóstico de cuál puede ser la evolución en los próximos años.
La Sindicatura, en sus ‘Recomendaciones' se inclina por reducir costes financieros y «analizar la existencia de organismos autónomos». También les reclama más control interno y potenciar las áreas de administración y contabilidad.
Al referirse a la situación contable del Cort, ahora gobernado por el Partido Popular de Mateo Isern, recoge el siguiente diagnóstico: «De acuerdo a su capacidad de ahorro que muestra la liquidación [correspondiente a 2010], el plazo medio que necesitaría el Ayuntamiento de Palma de Mallorca para amortizar su deuda es de 43 años». Y añade: «Ningún otro ayuntamiento supera los 10 años, excepto el de Llucmajor, que necesitaría 23,4 años». Calvià, Marratxí y Maó son los municipios que terminaràn de pagar antes su deuda.
Todos los ayuntamientos, salvo el de Palma, presentan un resultado patrimonial positivo. La Sindicatura destaca el caso de Sant Josep de Sa Talaia (Eivissa).
El margen estructural, el que indica la sostenibilidad financiera, de los ayuntamientos de Ciutadella de Menorca, Llucmajor, Manacor y Palma es negativo.
La media de endeudamiento sobre ingresos de los ayuntamientos representa un 72,3%.
Endeudamiento real
El endeudamiento real, sin embargo, es mayor de lo que refleja el informe de fiscalización que, desde finales de julio, obra en poder del Parlament. Por dos motivos: no se incluyen, en general, l datos referidos a las sociedades y empresas públicas y, por otro, los préstamos para pagos se han ido incrementando.