Los sindicatos mayoritarios de las Islas -UGT, CCOO y USO- y las patronales CAEB y PIMEM coinciden en mostrar su preocupación por como afectarán los nuevos modelos de contrato, que piensa llevar a cabo el Gobierno central, a los trabajadores fijos discontinuos de Balears.
El Ejecutivo de Rajoy ha anunciado que reducirá a cinco todos los modelos de contrato de trabajo, frente a los 41 actuales, y refundirá en la Ley de Empleo todos los incentivos existentes en materia de contratación en un único texto legal.
CAEB. El presidente de la patronal, Josep Oliver, aseguró ayer que «la reducción del número de contratos es una reivindicación histórica de los empresarios», si bien reconoció que habrá que ver la letra pequeña de la nueva legislación. Oliver mostró su preocupación por el futuro de los contratos fijos discontinuos. Una figura contractual clave para el mercado laboral balear.
PIMEM. Manela Campos, secretaria general de la asociación que representa a la pequeña y mediana empresa, afirmó ayer que «el 95 % de las empresas de Mallorca son de carácter familiar» y que lo que les preocupa más que el número de tipo de contratos que se puedan hacer, es «conseguir trabajadores que permanezcan en sus puestos durante mucho tiempo». También mostró su preocupación por cómo se resolverán los contratos fijos discontiuos.
UGT. El secretario general de Acción Sindical y Empleo de UGT, Manuel Pelarda, afirmó ayer que «el anuncio de la ministra de Empleo, Fátima Báñez, es una cortina de humo» y puntualizó que «nos quieren hacer creer que, con la reforma laboral, se ha creado empleo, cuando lo que ha pasado es todo lo contrario». Pelarda indicó que «el 85 % de los contratos se están haciendo en fraude de ley y de eso no habla el Gobierno», y apostilló «lo que nos tendrían que explicar es qué piensan hacer con los contratos fijos discontinuos».
CCOO. La responsable de Empleo de CCOO Balears, Silvia Montejano, se preguntaba ayer en voz alta: «¿Qué pasará con los fijos discontinuos?» y añadía que «sean cinco o 41 los tipos de contrato, lo que está claro es que la reforma laboral no ha creado empleo, sino todo lo contrario, lo está destruyendo» y «que el Gobierno no ha consensuado ninguna medida con los agentes sociales».
USO. La opinión anterior es compartida por el secretario general de USO, David Díaz, quien ayer dijo que «la reforma laboral no ha creado empleo, lo ha destruido». Para Díaz lo menos importante es el número de contratos que haya, «de hecho 41 modelos distintos era una barbaridad». El secretario general de USO también mostró su preocupación por los fijos discontinuos. «Nos tendrán que explicar, con detalle, que tipos de contratos va a haber», afirmó.