Cort le ha propuesto a los propietarios del solar en el que se construyó el Servicio de Acogida para transeuntes (saps) cambiarle el uso a un solar que tienen en Son Fuster a cambio de quedarse con el terreno del Molinar para no tener que derribar el saps. En concreto, el solar de los citados propietarios en Son Fuster pasaría de asistencial privado a comercial y se permitiría un incremento de la edificabilidad hasta llegar a un valor total de 1,2 millones de euros en los que está tasado el solar del Molinar.
El Ajuntament tiene 7 meses para ejecutar una sentencia que lo obliga a derribar el saps y devolver los terrenos a sus antiguos propietarios, ya que lo cedieron para que tuviese un uso educativo y el gobierno de Aina Calvo decidió que fuese asistencial. Valls explica que con la propuesta que han realizado a los propietarios se da cumplimiento a un acuerdo de pleno, en el que se instó al equipo de gobierno a negociar con los propietarios para evitar que el saps fuese demolido.
La propiedad aún no ha contestado a la oferta de Cort; sí lo ha hecho la oposición, que la rechaza. PSOE y Més consideran que la opción más adecuada es permutar el solar del Molinar por otro municipal valorado en 1,2 millones de euros. El portavoz de Més, Antoni Verger, calcula que los propietarios saldrían ganando unos 500.000 euros.
El titular d'Urbanisme lo negó y aseguró que los técnicos municipales serán los encargados de cuantificar que el cambio de uso y el incremento de edificabilidad tienen un valor total de 1,2 millones de euros. «¿Por qué hay que sacrificar un solar de la ciudad valorado en 1,2 millones cuando podemos realizar un cambio de uso que no le cuesta nada a Cort», se pregunta Valls que añade que el cambio de uso es acorde con el entorno.
El regidor aseguró que la propuesta del Consistorio no se materializará sin el consenso de la oposición y se derribará el edificio del saps como dicta la sentencia.