El grupo parlamentario y el PSIB critican que la salida a subasta del hotel anexo al Palacio de Congresos por valor de 40,5 millones de euros no permite recuperar la inversión realizada en el mismo, puesto que su precio actual es menor al que será cuando se acaben las obras. El PSIB ha afirmado que «la cifra de venta es la de un hotel en obras, pero la adjudicataria recibirá un hotel acabado».
Ambos grupos han señalado en sendos comunicados que esta puesta en venta beneficiará al adjudicatario, ya que con pagar una penalización podría deshacerse de la gestión del equipamiento anexo, algo que los socialistas consideran «inadmisible».
Además, el adjudicatario también podría desentenderse del Palacio por diversas causas, ha apuntado MÉS, como por ejemplo en caso de que se tarde más de cuatro meses en abrir el palacio a partir de la fecha fijada con el Ayuntamiento o si durante 60 días naturales suspende la explotación del mismo.
MÉS ha apuntado que «lo que aparentemente son garantías para la explotación del Palacio, realmente son facilidades para que el adjudicatario se deshaga del Palacio y vuelva al Ayuntamiento».
Por otra parte, los socialistas han recordado que la finalización de las obras ya estaba garantizada con el pago de la deuda contraída hasta el 31 de mayo con la empresa constructora Acciona de 43 millones de euros que permitiría acabar las obras.
MES ha insistido en la «necesidad de actualizar el estudio de viabilidad que debe incluir los costes de mantenimiento del edificio para poder decidir si se puede continuar adelante con esta una insfraestructura.