Des Güell a Lluc a peu', en su edición número cuarenta, ya lo tiene prácticamente todo perfilado. A una semana vista, el piloto de Moto 3, Lluís Salom, dará la salida. Pep Egea, que es el presidente del Grup Güell, sobre el cual cae todo el peso de la prueba en cuanto a organización, a falta de pequeños detalles, cree que lo tiene todo bien atado.
«En esta edición –nos dice– serán tres eventos en uno. Por una parte, el tradicional ‘Des Güell a Lluc a peu' empezará a caminar a las once de la noche. Por otra, una subida en carrera a Lluc. Por otra, para gente con menos resistencia, una carrera con salida de Binissalem a medianoche. Y por otra, una subida Nordic Walking, con bastones.
En cuanto a otras novedades, este año los inscritos llevarán, ya bien en la muñeca o en la pierna a la altura del tobillo, un chip desechable que se podrán quedar como recuerdo una vez finalizada la prueba».
—¿Cuánto pagan los que se inscriben en la prueba?
—Muy a pesar nuestro, 2 euros. Y digo que muy a pesar nuestro porque nos gustaría que nadie pagara nada. Pero al no tener ningún tipo de ayuda ni subvención, los gastos los hemos de pagar entre todos. Y me refiero a los 37 autocares que hemos contratado, más las 11 ambulancias que se repartirán a lo largo del recorrido, los trofeos (tres masculinos y tres femeninos para cada prueba), los diplomas, los chips, los seguros de responsabilidad y el de la carrera, etc. ¡Ah!, bueno, están también los 3.000 kilos de fruta, los refrescos, los cafés, el agua… Todo eso lo hemos de pagar entre todos. De ahí que se cobren esos 2 euros por participante.
—¿Qué más se precisa para que esta prueba llegue a feliz puerto?
—Pues una serie de dispositivos de la Guardia Civil, otros tantos de Protección Civil y tres hospitales de campaña, que estarán en Lloseta, Selva y Lluc, así como voluntarios de Binissalem, Consell y Santa Maria, así como diversos puestos de avituallamiento a lo largo del recorrido.
—¿Hay ya muchos inscritos?
—Las inscripciones van bien, pero hasta el último día, en el que se suelen apuntar muchos, no sabremos cuántos seremos este año. Aparte, como suele ocurrir cada vez, están los no inscritos, los que se suman a la subida a partir de tal o cual localidad, que son muchos, y que la organización no puede ignorar en el sentido de que si tiene un accidente le auxiliamos. Pero sí, creo que un año más, volveremos a ser muchos.
—Y con anterioridad a la salida, habrá revetla, ¿no?
—Por supuesto que sí, y en ella participarán Madò Pereta, habrán monitores de zumba para animar a la gente y un grupo de ball de bot también para que la gente baile. Y antes de que Lluís Salom dé la salida, descubriremos las huellas de sus pies, que es otra de las tradiciones de esta prueba.