La situación financiera de la Comunitat sigue siendo delicada hasta el punto de que entre junio de 2011 y marzo de 2013, al Govern no le ha quedado más remedio que recurrir a los bancos para financiarse. Y a qué precio: la deuda bancaria, el dinero que el Govern debe a los bancos, ha aumentado en 1.264 millones en ese periodo, lo que implica un ritmo de dos millones de euros al día.
Son datos facilitados por el Banco de España, que ya está a punto de detallar a cuánto ascendía la deuda de la Comunitat en junio de este año.
A la hora de entender este crecimiento espectacular de la cantidad que se debe a los bancos, hay que tener en cuenta que cerca de 800 millones del total corresponden al plan de pago extraordinario a los proveedores.
Proveedores
Es decir, ese dinero que el Pacte debía a sus proveedores se debe ahora a los bancos. Este es el argumento que utiliza el Govern para justificar ese aumento sustancial.
Sin embargo, también debe tenerse en cuenta que, en estos momentos, el Ejecutivo de Bauzá debe unos 800 millones a sus proveedores, lo que da un empate técnico: Bauzá ha bancarizado 800 millones que debía el Pacte pero sigue debiendo 800 millones a sus proveedores.
Pero basta con echar la vista atrás para darse cuenta de que el recurso al endeudamiento no es una exclusiva del Govern Bauzá. En 2007, cuando Antich llegó al poder, se encontró con un endeudamiento bancario de 1.798 millones de euros. Cuatro años después, dejó a Bauzá una deuda de 4.560 millones: 2.762 millones más, es decir, un 153 por ciento más de la que había.
Remontarse a la legislatura de Jaume Matas es más de lo mismo: en 2003 recibió una deuda de 858 millones de euros que en 2007, cuando dejó el Govern balear, había aumentado un 109 por ciento hasta los 1.798 millones de euros.