La tensión llegó ayer a dos embarques que se produjeron en el aeropuerto de Eivissa antes de las 13,00 horas en dos vuelos de Ryanair. A las 13,10 horas estaba prevista la salida del vuelo Eivissa-Bolonia y a las 13,15 la de Eivissa-Madrid. Ambos pasajes estaban embarcados en el avión cuando los de Bolonia tuvieron que abandonar la nave «por problemas técnicos», según ha podido saber este periódico y según confirmó ayer Robin Kiely, director de Comunicación de Ryanair: «El vuelo de Ryanair Eivissa-Bolonia de hoy [por ayer] ha sido retrasado debido a un pequeño problema técnico. Con el fin de agilizar la situación, y por razones operativas, los pasajeros han desembarcado del avión y han sido llevados a un avión de recambio, el cual ha salido hacía Bolonia con una hora de retraso».
Como consecuencia de esto, el vuelo a Madrid previsto para las 13,15 horas se retrasó, pues los pasajeros de Bolonia embarcaron en el avión de los pasajeros que inicialmente iban a Madrid. A los pasajeros que iban a Madrid, ya sentados, les comunicaron que tenían que desalojar también el avión por problemas técnicos, pero su sorpresa vino cuando comprobaron que subían a ese mismo avión los pasajeros con destino Bolonia. El enfado del pasaje que se dirigía a la capital española fue monumental, tanto que incluso hubo momentos de tensión entre trabajadores y pasajeros hasta el punto de que tuvo que personarse la Guardia Civil, según comentaron testigos del altercado. Este punto no fue confirmado por el director de Comunicación de Ryanair, quien sí reconoció el retraso del vuelo a Madrid: «El vuelo Eivissa-Madrid ha sufrido consecuentemente un retraso [debido al problema operativo del vuelo de Bolonia] y los pasajeros han recibido un bono de comida antes del embarque en un avión de repuesto el cual ha salido a Madrid con cinco horas de retraso. Ryanair pide disculpas a todos los pasajeros afectados por estos retrasos», explicó. Finalmente, este vuelo partió de Eivissa a las 18,25 horas de ayer.