MÉS per Palma afirma que los recortes en líneas de autobuses y la reducción de las frecuencias «perjudica gravemente» a los usuarios y aumenta la «masificación» de las líneas y el tiempo de espera en las paradas, mientras «cada día, hasta 35 autobuses se acumulan estacionados en las cocheras de la EMT».
La coalición ecosoberanista ha criticado, en un comunicado, la «mala gestión» llevada a cabo en la EMT por parte del equipo de Gobierno del PP, presidido por el alcalde de Palma, Mateu Isern.
El portavoz de MÉS en el Ayuntamiento de Palma, Antoni Verger, y la regidora de esta coalición, Marisol Fernández, han recordado que en los últimos dos años, Isern ha «suprimido líneas, ha disminuido frecuencias y ha aplicado una subida de las tarifas del 23%».
Verger ha afirmado que «en dos años de gestión del PP, se han acumulado muchas decisiones contra el servicio público que presta la EMT, provocando un empeoramiento inaceptable del servicio por una ciudad como Palma, que necesita de un sistema de movilidad sostenible y eficiente para facilitar la vida, tanto de los residentes, como de los turistas».
«Recortes indiscriminados»
Por otra parte, el portavoz de MES ha remarcado que el equipo del Gobierno está «degradando» el servicio de transporte público de Palma aplicando «recortes indiscriminados» sin informes técnicos que los justifiquen y sin ningún «consenso ni diálogo». «Se nota que el alcalde no es usuario de la EMT», ha concluido.
Verger ha afirmado que «es especialmente grave que estos recortes se hagan en tiempos difíciles de crisis económica, social y energética, ya que es cuando los gestores públicos deben garantizar más que nunca el derecho de los ciudadanos a la movilidad», puesto que muchos ciudadanos no pueden costearse un coche privado, de manera que «dependen absolutamente del transporte público».
Asimismo, Marisol Fernández ha asegurado que es «muy injusto y abusivo» que el Ayuntamiento cargue sobre los usuarios de la EMT el «peso de los recortes».
Barrios afectados
La coalición ecosoberanista incide en que estas «malas decisiones» afectan a una mayoría de palmesanos que viven en los barrios de la capital mallorquina, puesto que las líneas que se han recortado, ocho en total el pasado mes de mayo, afectan a los usuarios de Son Espases, del Hospital Joan de Déu, de Son Sardina, Son Dameto, Es Fortí, Son Roca, La Vileta, Establiments y el Coll d'en Rebassa, entre otros.
MÉS per Palma censura que mientras estos usuarios se ven afectados, haya «una gran cantidad» de autobuses en las cocheras de la EMT, algo que, asegura, han podido comprobar esta mañana los regidores.
Por último, la coalición considera «indignante» la situación y afirma que seguirá «insistiendo y exigiendo» al presidente de la EMT y al alcalde de Palma una «rectificación inmediata».