El súper yate Venus, con un coste de construcción de 138 millones de dólares y considerado como el diseño más vanguardista en el mundo de la náutica, llegó ayer por vez primera al Club de Mar de Palma, en su singladura inaugural por aguas del Mediterráneo.
Concebido por el fundador de Apple, -Steve Jobs, recientemente fallecido-, como una villa contemporánea en el mar, es el resultado de un diseño realizado junto al célebre Philippe Starck, lo que le otorga un carácter único.
En su controvertida estética de estilo minimalista destacan unos ventanales que llegan hasta la misma proa, recta y resaltada por un tajamar cromado. Construido en 2012 en Holanda por Feadships, de Aalsmeer, posee un casco y superestructura de aluminio de 79 metros de eslora.
Se le considera el iPhone de los yates y se gobierna mediante siete iMacs que controlan desde el puente todas sus funciones. Además, posee a bordo el primer ‘beach club' en un yate, el cual ocupa buena parte de la cubierta, revestida en madera de teca.
Bautizado en homenaje a la diosa romana de la belleza y el amor, pertenece ahora a la familia de Steve Jobs, quien no pudo ver cumplido su sueño náutico de navegar a bordo.