Son jardines a pequeña escala, rincones verdes vecinales que dan vida a las barriadas. Más de una veintena de estos espacios se distribuyen por Palma, configurando un modelo de ciudad caracterizado por la dispersión de zonas verdes. Al margen de grandes jardines y corredores como el Parc de Ses Vies, el Parc de Sa Riera, Son Parera o el Parc de Bellver, hay otras muchas cuya superficie total no supera los 1.500 metros cuadrados (cifra muy inferior, por ejemplo a los más de 20.000 metros cuadrados del Parc de Ses Fonts). En total, Palma cuenta con casi dos millones de metros cuadrados de zonas verdes.
Variados
Entre los más recientes figuran el Parc Son Rullán, creado en 2010 y diseñado por Agustín García. También posee zona deportiva y zona de juegos. Ese mismo año Son Ximelis estrenó zona verde, un proyecto diseñado por Narcís Ventura. Entre los de mayor superficie figura el Parc Son Costa, de más de 16.000 metros cuadrados y ubicado en Son Oliva. Cuenta con una fuente y dos toldos de madera, zona de juegos, de paseo y arbolado, parterres y flores. Es uno de los parques más populares entre sus vecinos. El Parc Ses Sorts es otro de los ‘pulmones' de la ciudad. Un espacio de más de 25.000 metros cuadrados situado al final de son Gotleu, junto al puente. Dispone de un camino principal, aparatos para realizar gimnasia, un trazado sinuoso con árboles variados, amplios parterres, arbustos, etc. La amplitud es una de sus cualidades.
Ejemplos de espacios de menor tamaño son, entre otros, el Parc Pare Cerdà, de poco más de 1.900 metros cuadrados y situado en la zona norte de la ciudad; también, aunque más espacioso, el Parc Son Dameto Nou (creado en 2008 y con 8.000 metros cuadrados), y el Parc Son Rossinyol (en la Platja de Palma y con 2.800 metros cuadrados).