El Govern confía en poder ingresar al menos 213 millones de euros más con la flexibilización del déficit y en el mes que queda hasta que se convoque la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera intentará que el Gobierno apruebe su propuesta de déficit asimétrico y le autorice un desfase de al menos el 1,5 por ciento del PIB, según aseguraron ayer fuentes del Ejecutivo.
Para entender la trascendencia de la flexibilización del déficit, es importante tener presente las siguientes cifras. En estos momentos, todas las comunidades tienen la obligación de cumplir el déficit del 0,7 por ciento del PIB, que en el caso de Balears son 186 euros aproximadamente.
Las cifras
El Govern ya ha dicho que está dispuesto a que las comunidades lleguen al 1,2 por ciento, lo que en caso de las Islas sería 133 millones más, pero el Govern quiere llegar al 1,5 por ciento, que serían 400 millones, es decir 213 millones más de los autorizados en estos momentos. Con esta cifra en la mano, el Govern considera que no hará falta aplicar los nuevos impuestos que en estos momentos negocia con los representantes de la oposición.
Dado que los nuevos impuestos no han entrado en vigor en el mes de mayo, como estaba previsto, y seguro que tampoco lo harán en junio, ya que no da tiempo a su aprobación, el Govern ya tiene un agujero en sus cuentas de 15 millones de euros, fruto de esos millones presupuestados y no recaudados. Ese agujero lo cubre, por ahora, con la relación del déficit al 1,2 pero la intención del Ejecutivo es ir más allá para renunciar a la puesta en marcha de algunos de estos impuestos.
El que cuenta con más posibilidades de no llegar a aplicarse es el de 'rent a car', por el que el Ejecutivo esperaba ingresar 15 millones de euros. También está en cuerda floja el de envases, con unos ingresos previstos de 35 millones de euros, lo que deja las previsiones de ingresos en los 8,5 millones contabilizados gracias al gravamen a las grandes superficies.
El resultado
Si se dejan sobre la mesa, como proponen dirigentes del PP en las reuniones internas, el Govern tendría un déficit presupuestario de unos 50 millones de euros que podría compensar ampliamente si Rajoy es sensible a las propuestas de Balears.
La oposición insistió en pedir ayer al Govern que haga todo lo posible para conseguir que el límite de déficit llegue al 2 por ciento del PIB y no se conforme con el 1,2 que ofrece Madrid.