El Gremio de Joyeros y Relojeros de Balears y las tiendas de compraventa de oro están preocupados por todo el proceso especulativo que ha habido en torno al oro durante la primera quincena de abril, principalmente porque el precio de esta divisa ha llegado a caer un 20 por ciento, afectando ello a la propia actividad de las empresas que se dedican a comercializar el oro, tanto en tiendas de compraventa como en joyerías.
«El mazazo para nuestro sector fue terrible, porque a medidos de abril, en concreto entre el 12 y 15, el precio de la onza de oro bajo 250 dólares, de los 1.660 a 1.320, todo ello debido a un proceso puramente especulativo impulsado por la Reserva Federal americana y los propios bancos centrales europeos. A nivel de calle, pasamos de los 26 euros por gramo de oro a 20 euros en los proyectos de joyería, es decir oro de 18 quilates. En cambio, el oro de 24 quilates, que es el oro de inversión, se mantiene entre los 30 y 34 euros por gramo», puntualiza Josep Palacios, responsable de la tienda Compro Oro Plaza de Progreso.
Especulación
El presidente del Gremio de Joyeros de Balears, Francesc Clapés, señala: «No era normal la subida habida en los dos últimos años, que disparó el precio del oro a cotas históricas. La crisis económica convirtió e impulso el oro como un refugio seguro, pero no era lógico este proceso, porque al final se ha visto que todo era un proceso puramente especulativo, en concreto sobre el oro de papel, que es el que manejan los bancos centrales».
Clapés añade que en los últimos días se ha recuperado en un 50 % la caída habida a mediados de mes, «porque el oro siempre será un refugio bandera para pequeños, medianos y grandes inversores. Ha habido todo tipo de rumores sobre las causas que han provocado este descenso en su cotización».
El impacto en joyerías y relojerías, según el presidente de este gremio, se ha notado, «porque ha afectado a los stocks de oro que tienen las empresas, que los compraron a un precio alto y tenían darle salida a un precio más bajo».
Tanto Clapés como Palacios coinciden que la especulación, si se produce de nuevo, afectará únicamente al oro de papel y no al oro físico, que se puede adquirir por gramos o por quilos.