El portavoz del Ayuntamiento de Palma, Julio Martínez, ha explicado este miércoles el «conflicto de intereses» que podría suponer que el jefe de administración de Emaya tuviera relación con las empresas concesionarias del reparto de facturas de agua y, a su vez, participara «activamente» en las adjudicaciones, «de las que se podría haber beneficiado».
Martínez ha aclarado que el trabajador «aún no ha sido despedido», puesto que el expediente que abrió la dirección tras detectar «un comportamiento irregular» aún se encuentra en trámite de audiencia para que el acusado pueda defenderse.
El también teniente de alcalde de Economía y Hacienda ha confirmado que estos hechos presuntamente irregulares se han comunicado a la Fiscalía, «que será la encargada de decidir si existe trascendencia penal o no».
Hasta el momento, Martínez ha apelado a la presunción de inocencia y ha avanzado que no concretará el número de concursos en los que participó el jefe de administración hasta que se resuelva el expediente.