El exsocio de Iñaki Urdangarin en el Instituto Nóos Diego Torres rompió ayer ante el juez José Castro el silencio pertinaz que mantenía desde hace más de un año para involucrar de lleno a la Casa Real, al yerno del Rey y a su esposa, la infanta Cristina, en la trama supuestamente corrupta creada en torno del Instituto Nóos.
Aunque ya lo venía apuntando a través de correos electrónicos y fotografías remitidas al juez en los últimos meses, Torres, que se había negado a declarar en dos ocasiones, insistió en defender la legalidad de los negocios en Nóos amparándose en el conocimiento que de ellos tenía la Casa Real.
La infanta Cristina, Iñaki Urdangarin y el secretario personal de las Infantas, Carlos García Revenga, estaban al corriente de todo lo que ocurría en Nóos, según aseguró Torres a lo largo de las casi siete horas que declaró ante el juez Castro, los fiscales anticorrupción Pedro Horrach, Miguel Ángel Subirán y las partes personadas en la causa.
Actividad
También mencionó en varias ocasiones al abogado José Manuel Romero, asesor jurídico de la Casa Real y conde de Fontao, quien recomendó a Urdangarin en 2006 que evitara tener un papel protagonista en la actividad pública del Instituto Nóos.
Según Torres, el conde de Fontao diseñó una estrategia para que Urdangarin no figurase públicamente en las actividades del Instituto Nóos ni en la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (FDCIS), que sucedió a dicha entidad.
El exsocio de Urdangarin, profesor de ESADE y a quien un imputado definió como ‘el gurú del márketing' respondió, sin titubear y muy seguro de sí mismo, al exhaustivo interrogatorio al que le sometieron Castro y Horrach, según explicaron las fuentes consultadas por este diario. En su relato de los hechos en torno a Nóos, Torres mencionó a La Zarzuela, al Rey, a la noble alemana Corinna Sayn-Wittgenstein, y al príncipe Felipe.
Con respecto a La Zarzuela, afirmó que fue el lugar elegido por Urdangarin para mantener una reunión con el expresidente y exalcaldesa de Valencia, Francisco Camps y Rita Baberá, respectivamente, sobre las jornadas Valencia Summit.
Dijo, asimismo, que Urdangarin mencionó al Monarca al pedirle a Corinna Sayn-Wittgenstein que le incluyera en su Fundación tal y como «le había indicado su suegro». Para ello, el marido de la infanta Cristina aportaba su currículum y el número de una cuenta bancaria.
Torres también se refirió al príncipe Felipe como integrante de un grupo desplazado a Pekín que realizó tareas de promoción de Madrid 2016 como candidatura olímpica.
El exsocio de Urdangarin fue interrogado por el supuesto delito fiscal denunciado por la Agencia Tributaria por el impago del impuesto de sociedades al que Nóos debía hacer frente en 2007. Afirmó que todas las facturas de ese ejercicio fiscal respondían a servicios reales, si bien no supo concretar a qué tipo de trabajos hacían referencia. Preguntado por la cuenta con 960.000 euros a su nombre hallada por la Agencia Tributaria en un paraíso fiscal, Torres aseguró que estos fondos eran fruto de los ahorros que había acumulado antes de ponerse al frente de Nóos junto con Urdangarin.
Calificó ese saldo en su cuenta de «dinero antiguo» e insistió en que los retiró de Andorra porque desconfiaba del sistema financiero andorrano.
Respecto a la implicación de la infanta Cristina y de su secretario, Carlos García Revenga, en la gestión del Instituto Nóos, investigado por presunta malversación de fondos públicos, Torres afirmó que ambos eran miembros de la junta directiva de la entidad, con un papel tan activo como el del resto de integrantes.
Tras la declaración de Torres, compareció su esposa, Ana María Tejeiro, que fue responsable del área jurídica y fiscal del Instituto Nóos, quien manifestó que desconocía la actividad que se realizaba en dicha entidad.
El próximo sábado están citados Iñaki Urdangarin y Carlos García Revenga.