El PSIB y el PSM reaccionaron ayer en tromba contra el PP y el president del Govern, José Ramón Bauzá, un día después de que el portavoz del Ejecutivo, Rafael Bosch, admitiera que la negociación sobre los descuentos aéreos se circunscribía a cuál va a ser el tope que se fijará para aplicar los descuentos. Desde Canarias, el ministro Soria, admitió que se estaban buscando baremos «razonables».
El origen de este conflicto está en los Presupuestos Generales de 2013 y, concretamente, en la disposición adicional de la partida del Ministerio de Fomento que contempla un límite subvencionable.
Durante la discusión de proyecto de Presupuestos, el PSOE propuso cuatro veces (dos en el Congreso y otras dos en el Senado) que se suprimiera esta disposición adicional. El PP votó en contra. Un cargo ‘popular' explicó ayer las razones: en el Congreso, porque se decidió que las enmiendas se presentarían en el Senado. Allí, porque se acordó que únicamente se votaría aquello que el Gobierno central estaba dispuesto a cambiar.
Soria: que bajen precios
El portavoz adjunto del PSIB, Vicenç Thomas, criticó ayer en Mallorca la estrategia del PP. «Nosotros ya lo advertimos y negaron que eso fuera a pasar. No sólo votaron en contra en el Congreso, sino que en el propio Parlament se negaron a apoyar una proposición no de ley en el mismo sentido».
Más dura fue Sofía Herranz, diputada socialista en el Congreso. Herranz, desde Eivissa, explicó que su grupo ha presentado una proposición no de ley en el Congreso para que la ministra de Fomento, Ana Pastor, no pueda hacer uso de la discrecionalidad que permiten los Presupuestos para fijar el máximo bonificable. Además pidió al president Bauzá que «ordene que se interrumpan estas negociaciones de espaldas a la ciudadanía».
«Les ha costado reconocer que estaban negociando y no les ha quedado más remedio que admitirlo cuando el propio electorado del PP se les estaba volviendo en contra», dijo. Herranz pidió al president que «dé la cara y explique a la opinión pública que no ha hecho nada».
Biel Barceló (PSM) también reclamó «una rectificación» del PP y mantuvo que «no es negociable el 50%». Promoverá iniciativas parlamentarias para que Bauzá «dé la cara».
La oposición entiende que el Ejecutivo se ha rendido ante las condiciones de Madrid.
El debate, sin embargo, va más allá. Tanto desde el Gobierno central como desde el Ejecutivo autónomo se admite que las rebajas directas a las compañías quizá no sean la alternativa. El ministro encargado de Turismo, José Manuel Soria, explicó que el Gobierno ha iniciado conversaciones con las aerolíneas que vuelan a las Islas Canarias para «intentar bajar el precio de los billetes» y que estos «sean menos onerosos». No aludió a Balears.
Al ser preguntado sobre la posición de quienes sostienen que no debería ponerse un tope a las ayudas, sino a los billetes, Soria reconoció que el Gobierno ya está hablando con las aerolíneas para intentar bajar el precio de esos billetes.