Las obras de demolición del edificio ‘La Lubina' fueron paralizadas el pasado 30 de noviembre a la espera de que Autoridad Portuaria conceda la autorización de desconexión del transformador actual, así como la conexión del nuevo. Desde la empresa concesionaria del proyecto, Amarres Deportivos S.L., destacaron que la desconexión y conexión de los transformadores ya tiene los permisos pertinentes del Ministerio de Industria y de Endesa, por lo que únicamente están a la espera de que Autoridad Portuaria firme la recepción del proyecto. Los citados transformadores son los encargados de suministrar luz a los edificios de la calle Moll, entre ellos los de Autoridad Portuaria y la propia ‘Lubina'. Las mismas fuentes expresaron su preocupación porque esto pueda producirse después de las fiestas navideñas, lo que supondría unas pérdidas de 200.000-300.000 euros para la empresa; así como un posible retraso en la finalización del proyecto que está previsto para noviembre de 2013.
Casi terminados
Los trabajos de demolición, que están prácticamente finalizados, fueron adjudicados a la empresa Fomento de Construcciones y Contratas por 93.000 euros. El edificio ‘La Lubina' tenía un total de 1.457 metros cuadrados, distribuidos en una planta baja de 771 metros y un primer piso de 687.
Las obras de construcción del nuevo proyecto de ‘La Lubina', que supondrá una inversión de 8 millones de euros, comenzarán en cuanto finalicen los trabajos de demolición.
En concreto, el restaurante ‘La Lubina' se construirá de nuevo y contará con un total de 490 metros cuadrados, el resto se alquilarán para uso terciario: bares, restaurantes, comercios e incluso oficinas. Además, en la parte alta habrá un mirador en el que se podrán celebrar eventos.
Este proyecto también contará con 24 amarres, que también serán explotados. Exactamente, 22 amarres tendrán capacidad para barcos 25 metros de eslora, mientras que dos son de 40 metros.
La empresa Amarres Deportivos S.L. también construirá la calle nueva y se encargarán del embellecimiento de la zona del Moll Vell, permitiendo así su unión con Antoni Maura. Además, la promotora correrá con los gastos de la estación transformadora de electricidad, que precisamente ha provocado la paralización de la demolición de las obras.
La empresa Amarres Deportivos S.L. está integrada por inversores mallorquines y de la Península, que tienen en concesión ‘La Lubina' durante 15 años, ya que fueron los ganadores del concurso público que Autoridad Portuaria adjudicó en el año 2010. Sin embargo, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) ha dado la razón a la empresa Formentera Mar, que se presentó al concurso público para la citada remodelación y la Autoritat Portuària la rechazó. El fallo obliga a Autoridad Portuaria a retrotraer el concurso público hasta el momento de la apertura de las plicas de las ofertas presentadas. Autoridad Portuaria y Amarres Deportivos S.L. han recurrido la sentencia, que no obliga la paralización de las obras, por lo que continúan adelante.