El grupo municipal del PSOE reclamó ayer al equipo de gobierno del Ajuntament de Palma rehacer el presupuesto para 2013, aún en trámite, «dado que se ha abierto una nueva puerta a la financiación de los ayuntamientos para el próximo año, a instancias de la Federación de Municipios, una puerta que el PP usó el jueves en el plenario por lo que se refiere a Ciutat para rectificar su decisión de cerrar las piscinas de Son Roca y Sant Jordi».
Según la portavoz del grupo socialdemócrata en Cort, Aina Calvo, «es una buena noticia que se haya desbloqueado una situación injusta para los ayuntamientos, y si así fuera hay que felicitar al PP, pero también hay que leer la letra pequeña de las condiciones que permitirán refinanciar deuda a los consistorios, como se ha aprobado a través de una enmienda en el Senado, a la Ley de Estabilidad Presupuestaria».
Prioridades
En ese sentido Calvo señaló que «si el PP ya ha anunciado que podrá mantener abiertas en Palma las piscinas con este dinero, es imprescindible saber cuanto antes de cuánto dinero estamos hablando y en qué condiciones, porque a la vista de los recortes esta situación abre la puerta a elaborar un nuevo presupuesto que priorice la atención social de la municipalidad a miles de personas que están en la peor de las situaciones posibles por su falta de ingresos, por sus problemas de salud y por ambas cosas al mismo tiempo».
El presupuesto del Ajuntament de Palma para 2013 fue aprobado inicialmente hace apenas una semana, y se encuentra en período de exposición pública para la presentación de alegaciones hasta el próximo día 13 de diciembre.
Aina Calvo reclama la mayoría de gobierno del PP paralizar la tramitación y reclama «un ejercicio de transparencia cuando acaba de aprobarse la subida de tasas y precios públicos porque los ciudadanos tienen derecho a saber que este ya no sería obligatoriamente el presupuesto para 2013 y tienen derecho a saber cómo se podría cambiar para beneficiarlos».
En este sentido, Calvo señala que se debe priorizar la atención social y garantizar los programas sociales, «y todos los servicios que se han eliminado, de espaldas a las personas que peor lo están pasando».