El presidente del Govern balear, José Ramón Bauzá, expresó ayer su «máxima tranquilidad» ante la denuncia presentada contra él por el grupo parlamentario PSM-IV-ExM por un supuesto delito de prevaricación, y la ha atribuido a la «estrategia habitual de la izquierda de judicializar la vida política». «Cuando uno no tiene argumentos y lo que quiere es tapar la mala gestión del pasado y la ausencia de un proyecto en el presente, es normal que use cualquier argumento», dijo al respecto en declaraciones a los periodistas antes del acto de conmemoración de la patrona de la Guardia Civil en el Palacio de la Almudaina.
Los hechos denunciados por el PSM-IV-ExM se refieren a la designación, presuntamente prevaricadora, del director gerente de IB3 Francisco de Borja Rupérez, a quien, según la denuncia, Bauzá nombró en este cargo porque tenía una relación empresarial con él que luego se rompió, momento en el que fue destituido.
Bauzá pinó que la denuncia es una estrategia «curiosa» que responde en realidad a una intención del grupo opositor de «tapar sus vergüenzas por una mala gestión y una falta de proyecto». «En cualquier caso, como siempre he dicho, respeto absoluto a la Justicia y máxima tranquilidad por mi parte», añadió.
PSIB. El parlamentario del PSIB Antoni Diéguez lamentó que Balears «otra vez» vuelva a tener «un presidente del Govern bajo sospecha» y pidió al líder del Ejecutivo autonómico que comparezca en el Parlament para «despejar toda sombra de duda». Después de que el PSM haya denunciado a Bauzá ante la Fiscalía, el socialista consideró que «lo importante es, más allá de la parte penal del asunto, que el president comparezca ante el Parlament y dé las explicaciones oportunas».
PSM-I-ExM. El portavoz del PSM-IV-ExM, Biel Barceló, manifestó que Bauzá «tiene que elegir entre la presidencia del Govern y sus negocios, porque no son compatibles y lo dice la ley». En su opinión, Bauzá «en lugar de dar ejemplo actúa con falta de transparencia, de manera opaca y fuera de la ley».
Barceló destacó que esto es especialmente grave si se demuestra que los negocios de Bauzá han influido en decisiones que se han tomado sobre organismos públicos. Los econacionalistas sospechan que este podría ser el caso de la contratación y cese de Borja Rupérez como gerente de IB3 y sus posibles negocios con la vinoteca El Divino, en la que el president tiene acciones. Barceló explicó que los servicios jurídicos del PSM-IV-ExM cosideran que estos hechos son constitutivos de delito, motivo por el que el pasado 24 de agosto decidieron denunciarlo ante la Fiscalía, que ahora investiga a Bauzá.
El portavoz econacionalista recordó que los grupos de la oposición ya pidieron explicaciones al jefe del Ejecutivo autonómico en el Parlament cuando se conoció que «Rupérez tenía el curriculum falseado y trascendió que su cargo podía ser a cambio de que le comprase la vinoteca».