La Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (Pimem) ha expresado su «gran decepción» ante el «incumplimiento» de la promesa del Gobierno de rebajar las prestaciones sociales en un punto en 2013, y pide que como primeras medidas de apoyo efectivo a las pymes se acelere la aprobación de la Ley de Emprendedores y se promulgue «de una vez por todas» el régimen sancionador de la Ley contra la Morosidad así como la introducción al criterio de caja al pago del IVA.
Tal y como ha puesto de manifiesto la entidad en un comunicado, Pimem «desconfía de que las medidas previstas de incremento del gasto sean más selectivas, y su aplicación voluntaria podrá favorecer a algunas empresas, aunque visto el fracaso de la amnistía fiscal podría ser más de lo mismo».
Por otra parte, otras medidas sobre el impuesto de sociedades afectan a las grandes empresas únicamente, eliminando incentivos a la reinversión, por lo que Pimem «sigue y seguirá reclamando un trato más favorable a la reinversión de beneficios y a la capitalización de las micro y pequeñas y medianas empresas», ha recalcado.
Por otra parte, la patronal, «como el presidente José Ramón Bauzá, cree que con la menguada inversión presupuestaria para Baleares el Gobierno demuestra la poca consideración con unas medidas injustas hacia nuestra Comunidad Autónoma, y expresa su disposición a apoyar a Bauzá en aquellas acciones que mediante enmiendas que presenten, y que ayuden a reconducir la situación de agravio hacia todos los ciudadanos de esta comunidad autónoma».