La organización Médicos del Mundo en Baleares ha denunciado el caso de una mujer de origen rumano que ayer tuvo problemas para ser atendida en un centro de salud de Palma, donde le solicitaron que pagara por anticipado la prestación cuando acudía por una urgencia, aunque finalmente la atendieron.
La entidad ha reclamado hoy a la Conselleria de Salud, Familia y Bienestar Social que «dicte de inmediato una orden a los centros sanitarios para que se atienda de modo gratuito las urgencias, a menores de 18 años y embarazadas», después de haber detectado algunos casos en los que se ponen dificultades a estas personas.
Desde Médicos del Mundo en Baleares, la portavoz Belén Matesanz ha explicado que ayer ocurrió un caso en un centro de salud de Palma donde reclamaban el pago previo a la atención a una mujer de origen rumano que acudió con una urgencia, una infección de oído, y le solicitaban 85 euros.
Finalmente la mujer fue atendida tras la intervención de personal de la ONG que está realizando servicios de acompañamiento a inmigrantes en los centros de salud de Baleares.
Los voluntarios de Médicos del Mundo, identificados con petos de la entidad, están interviniendo en los hospitales y centros de salud de Mallorca para pegar carteles informativos, y entregar documentación en la que explican a la población sin tarjeta sanitaria los derechos que la ley todavía les concede para ser atendidos en el sistema de salud de forma gratuita.
Según Matesanz, aunque la exclusión de la atención a quienes no estén inscritos en la Seguridad Social entró en vigor el lunes, hace más de dos meses que se están sucediendo este tipo de casos.
La organización ha pedido también a la Conselleria de Salud que habilite de forma urgente los sistemas informáticos para poder brindar una atención adecuada a los menores, embarazadas y extranjeros con protección internacional, los tres supuestos que siguen protegidos por la ley 16/2012.
Consideran que es inviable atenderles si los profesionales no pueden acceder al historial clínico para hacer seguimiento en el caso de las embarazadas o en pacientes pediátricos.
«Pueden introducir los datos de la urgencia, pero no acceder al historial, de forma que siempre es como si fuera una primera y única visita», ha detallado Matesanz, que insiste en que esa situación también está complicando la atención a quienes tienen una patología crónica.
La ONG insiste en reclamar a la Conselleria que «explicite» el modo en el que los médicos que atienden urgencias en centros de salud y hospitales pueden introducir en el sistema informático a los demandantes de atención menores y gestantes y las urgencias porque «sin esa opción informática es materialmente imposible para el facultativo realizar los estudios oportunos para saber si es una urgencia».