Ni el boom turístico habido en agosto ha logrado reducir el número de parados en las Islas respecto al mismo mes del pasado año, registrándose 3.595 desempleados más en 2012. El único dato positivo en la evolución de coyuntura laboral, según el Govern, es que por vez primera desde 1988 ha descendido el número de parados respecto a julio, en concreto en 564 (ver gráfico adjunto).
La directora general d'Economia i Estadístiques, Joana Aina Perelló, señaló ayer en la presentación del informe de coyuntura que los datos de paro referentes al mes de agosto «apuntan a un descenso del desempleo mensual en Balears en 564 personas, lo que supone una caída del -0,75%. El balance es positivo porque desde 1998 el paro siempre subía en agosto. En esta ocasión no ha sido así, si bien hay que ser previsores. Atribuimos que el desempleo haya disminuido a la buena temporada turística».
Interanual
En cuanto al dato intermensual, reflejó que el paro en Balears ha crecido un 5,04%, muy por debajo de la media nacional (11,98%). De hecho, destacó que la comunidad balear «experimenta un menor incremento del paro del país».
Preguntada sobre el impacto del sector turístico en la contratación laboral, al ser el mes punta de actividad, indicó que «la contratación se ha hecho con antelación, por lo que no tiene que tener un efecto en agosto».
Añadió que el paro había descendido en agosto un 0,75 % en agosto, pero con un total de 74.960 parados, cifra que supone un incremento del 5,04 % respecto a agosto del año pasado, con 3.595 parados más.
Perelló atribuyó este aumento en el número de parados con respecto al año anterior a que hasta mediados de 2011 se produjo una inyección de capital público que se tradujo en más empleos en el sector público, «por lo que había más gente contratada que ahora, gracias al Plan E y otros planes de ese tipo».
Dentro de los objetivos del Govern para mejorar las cifra del paro, la directora general d'Economia puntualizó que el Ejecutivo autonómico «está trabajando para desestacionalizar la temporada turística de Balears, para intentar alargar los contratos fijos-discontinuos durante dos meses más y para llevar a cabo políticas de ocupación».
A la pregunta de por qué se han perdido 6.793 empleos en un año pese a la buena coyuntura turística de Balears, Perelló respondió que «a lo mejor no eran del sector turístico, probablemente eran del sector de la Administración».