El portavoz del PP balear, Miquel Ramis, ha asegurado hoy que el partido no le ha pedido en ningún momento a José María Rodríguez que presente su dimisión como delegado del Gobierno en Baleares, aunque le ha agradecido el «gesto» y ha subrayado que el presidente del PP de Palma no está imputado en ninguna causa.
Ramis ha alabado la actitud de Rodríguez por abandonar su cargo público a raíz de una investigación judicial que aún es secreta, al tiempo que se ha mostrado convencido de que «se aclarará todo en su beneficio».
A la actitud de «responsabilidad y de dar la cara» de Rodríguez, que ha comparecido esta tarde en rueda de prensa, el portavoz popular ha contrapuesto la postura de la secretaria general del PSIB-PSOE, Francina Armengol, de «esconderse debajo de las piedras y callarse como un muerto desde hace ya una semana».
El portavoz popular ha aludido al informe de la Sindicatura de Cuentas que concluye que la adjudicación en la pasada legislatura a la pareja sentimental de Armengol de un contrato de jardinería de la funeraria de Palma por parte del Ayuntamiento de Palma, gobernado por los socialistas, fue ilegal.
«Son dos modos de entender la política: en el PP, ante una hipotética investigación, se da un paso al frente, y en el PSOE el silencio es estrepitoso», ha señalado Ramis.