Palma ayer amaneció crispada. El IVA sube, los parados cobrarán menos a partir del sexto mes y los funcionarios no tendrán paga extra en Navidad. Son las nuevas medidas del nuevo plan de recortes y los ciudadanos mallorquines no han tardado en reaccionar. En la calle reina la indignación y las quejas contra el Gobierno, los políticos en general.
Muchos de los ciudadanos opinaban ayer que «los que se deberían de recortar los sueldos son los políticos en general y los altos cargos». «Cada vez tenemos menos dinero y la gente no puede consumir. Ya no nos podemos dar ningún capricho. Ahora tomar un café en un bar es un lujo. No hay derecho». Algunos piensan que las medidas son positivas y necesarias para salir de la crisis. «Todos tenemos que poner de nuestra parte y hacer un esfuerzo» decía Mario.
Los funcionarios
Los funcionarios salen perjudicados una vez más. Entre ellos existe indignación y miedo. Maties, funcionario de Sanidad decía que «siempre somos los malos de la película. No hay derecho. Debemos arrimar el hombro pero todos. Los altos cargos nunca se recortan nada. El poder público está muy mal repartido».