La Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA) ha denunciado hoy la permisividad del Ayuntamiento de Palma ante las modificaciones que han llevado a cabo los propietarios de los apartamentos que conforman el edificio de Can Savellà sin tener en cuenta los valores históricos y artísticos.
ARCA ha asegurado hoy en un comunicado que el patrimonio de Palma cada vez es «menos histórico», hecho que ha ejemplificado con el caso de Can Savellà, un edificio de origen medieval, también conocido como Can Juny, que se reformó en los siglos XVII y XVIII y ocupa los números 11 y 13 de la calle de mismo nombre.
La asociación ha explicado que este antiguo casal se reformó de nuevo a finales de los ochenta por el arquitecto José Obregón, que transformó el edificio en diversos apartamentos, hecho que en los últimos años ha motivado que los propietarios hayan modificado o ampliado su residencia sin tener en cuenta los valores históricos y artísticos del edificio.
Según ARCA en 2006 se construyó una terraza para el ocio en la parte superior del edificio y se recubrió con materiales de masa modernos, como el cristal y la madera, y además, se colocaron aparatos de aire acondicionado que «alteran la imagen de un edificio histórico» de estas características.
La asociación ha señalado que un vecino de Can Savellà 11 subió el cuerpo de su vivienda mediante una claraboya para tener mejor iluminación en el interior, «alterando la volumetría del edificio».
ARCA ha criticado también que en uno de los patios interiores había dos ventanas con rejas de fundición, que uno de los propietarios eliminó y, aunque la asociación ha indicado que se le obligó a restaurarlas, el vecino no pasó por la Comisión del Centro Histórico y las rejas que colocó no son las mismas.
La asociación ha indicado que Can Savellà no es un caso aislado, ya que en otros edificios de Palma se ha alterado el paisaje histórico urbano, por lo que ARCA ha pedido que el Ayuntamiento de Palma se involucre y no permita que se deteriore el patrimonio cultural.