La actividad solidaria de los padres capuchinos de Palma no cesa. Ahora acaban de ampliarla instalando un pequeño dispensario médico.
Entrando en la iglesia a la derecha se encuentra instalada una sala polivalente que se destina a pequeño consultorio médico, de momento muy sencillo y humilde, para orientar o ayudar a las personas que lo necesitan.
Servicio
Según explicó el capuchino Josep Maria Segarra, coordinador del Pa de Sant Antoni, «tres médicos de forma desinteresada se ocupan de esta labor». Con relación a la actividad del Pa de Sant Antoni, en la que cada mañana se ofrece un bocadillo, leche y, si la hay, fruta en una puerta lateral del templo, Segarra señaló que «desde enero hasta mayo de 2012 hemos ofrecido un total de 39.656 bocadillos, que da un promedio de 305 diarios. Esta labor es posible gracias a un voluntariado abnegado y numeroso, y también en las aportaciones generosas de la gente».