Desde el pasado jueves y hasta ayer, la afluencia de clientes en las farmacias de Palma ha ido en aumento. Los ciudadanos han hecho acopio de medicinas ante la entrada en vigor del ‘medicamentazo'. El nuevo sistema de copago se aplica también a los pensionistas que, a partir de hoy, pagarán por los medicamentos.
El sistema que entra en vigor es un desconocido para muchos usuarios que estos días vienen solicitando información en las boticas de Palma.
«Los pensionistas son los que muestran un mayor temor, ya que muchos necesitan una cantidad muy importante de medicamentos y temen no poder pagarlos», comentó ayer la encargada de una conocida farmacia de Palma.
«No saben si será viable adelantar el dinero o cuánto tiempo tendrán que esperar para recuperarlo», añadió.
Este fin de semana está siendo ajetreado para los empleados de farmacia que ultiman la puesta a punto del sistema informático que calculará la factura exacta que debe pagar cada contribuyente.
Receta de papel
«La receta electrónica es mayoritaria, pero en caso de que los clientes acudan con receta de papel también se verán obligados a pagar desde el primer día», comentó otro encargado.
Serán los responsables de las farmacias quienes realizarán la gestión a través de una llamada telefónica para obtener un código numérico que les permita cuantificar el pago de la receta de papel.
La introducción del copago farmacéutico supone un cambio drástico para los pensionistas, que por primera vez pagarán el 10% del valor de los medicamentos, aunque con un tope por renta y mes.
Los trabajadores que tengan una renta anual inferior a los 18.000 euros, pagarán lo mismo que hasta ahora, el 40% de los medicamentos.
El segundo tramo, las rentas que se sitúan entre 18.000 y 100.000 euros, aportarán la mitad del valor. Por último, si la renta anual supera los 100.000 euros, entonces la cuantía sube al 60%.
Los parados que no reciban prestación o las personas que perciben una renta mínima de inserción están exentos del copago.
Otra de las dudas que plantean los usuarios en las farmacias se refiere a la lista de 426 medicamentos que el próximo 1 de agosto dejarán de estar financiados.
Sin financiación
«Los protectores de estómago son una de los fármacos más recetados entre las personas mayores, más que nada, porque ingieren una gran cantidad de medicinas», comentaban ayer en las boticas.
La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria-Illes Balears (Semergen-IB) destacó ayer «la necesidad de seguir prescribiendo estos fármacos, aunque no estén financiados, con el objetivo prioritario de evitar la automedicación».
Los médicos advirtieron del efecto contrario que puede ocasionar la citada lista. No habrá ahorro si finalmente los médicos comienzan a recetar fármacos de un grupo no financiado a otro, «como ya ha sucedido en el pasado», añadieron.