La expresidenta del Consell de Mallorca Maria Antònia Munar (UM) ha pedido hoy a la jueza del caso Voltor de corrupción que le tome declaración, después de que el pasado diciembre acudiera a los juzgados citada en calidad de imputada pero se negara a declarar por problemas de salud.
El abogado de Munar, Gabriel Garcias, ha presentado esta mañana la petición en el juzgado de instrucción 10 de Palma, que investiga la causa y que ahora deberá fijar la fecha de la comparecencia de la también expresidenta de UM, han informado fuentes jurídicas.
Munar fue citada en diciembre por la jueza Carmen Abrines por una pieza de Voltor que investiga la contratación por parte del Consorcio de Informática Local de Mallorca (Cilma), dependiente del Consell cuando lo presidía, de una veintena de personas que se sospecha trabajaron para UM.
En esta pieza se investigan tres convenios entre el Consell de Mallorca y el Cilma para poner en marcha sendos proyectos durante la legislatura 2003-2007, en la que UM presidía el Consell.
Estos tres proyectos fueron Infomallorca, una página web de información de la isla, Mallorca Digital, una plataforma para digitalizar bases de datos, y Eiel, una encuesta sobre las necesidades de los ayuntamientos.
El primero de ellos lo financió el departamento de Turismo del Consell, el segundo el de Cooperación Local y el tercero el de Vicepresidencia.
Cada uno de ellos costaba al Consell entre 100.000 y 150.000 euros anuales y empleaban entre todos a unas 35 personas, de las cuales 29 se sospecha que realmente trabajaron para UM.
El fiscal, según las preguntas que en diciembre hizo constar tras la negativa de Munar a declarar, le iba a preguntar acerca de si firmó con Cilma los tres proyectos, y si sabe si el exgerente de esta entidad, Eugenio Losada, declaró que los proyectos se destinaron a otras labores.
También le pretendía preguntar acerca de si sabía que los propios trabajadores de esos proyectos los ignoraban completamente y reconocieron en cambio -salvo tres de ellos- que trabajaron realmente para UM.
Otro aspecto por el que iba a interrogar a Munar era si «urdió», junto con el exconseller Miquel Nadal, la exconsellera Catalina Julve, el exconseller Miquel Ángel Flaquer -todos ellos de UM- y otros miembros de su partido una supuesta red de trabajadores pagados con dinero público que hicieron labores para la extinta formación nacionalista.