Una encuesta inmediata sobre la decisión del Gobierno de España de abrir el copago en los medicamentos señaló ayer que los palmesanos «comprenden» la decisión política en el marco de la crisis económica, pero rechazan su impacto en la población con ingresos mínimos y particularmente en la que, además, padece enfermedades crónicas por las que deben consumir medicinas a diario.
Gran parte de los encuestados en oficinas de farmacia -con pensión superiore a 1.000 euros mensuales- afirmó que no se oponen a que los medicamentos dejen de ser gratuitos, mientras las personas con pensiones no superiores a 800 euros rechazaron de plano el copago y varias de ellas manifestaron que «rechazarán» un tratamiento «si no podemos pagarlo».
Deuda notable
Por lo que respecta a responsables de farmacias en Ciutat, la encuesta de este diario encontró a una mayoría favorable «a la racionalización de la receta de medicamentos» como una situación «mejor para pacientes y dispensadores», mientras se mostraron en general desconfiados sobre la deuda de las comunidades autónomas con sus establecimientos «porque hoy el agujero es tan grande que no se resolverá con medidas de futuro».