«Sin la divinidad que está en cada uno de nosotros, en cada uno de los seres humanos, sólo seríamos animales», afirmó ayer la cabalista Karen Berg ante un público expectante por conocer 'El mensaje que te cambiará la vida', el mensaje que transmite la sabiduría antigua de la cábala.
Berg llenó la sala Luis Molina del Pueblo Español, con un aforo para 300 personas, en la única conferencia que impartirá en España y en la que han participado estudiosos de esta experiencia espiritual procedentes de Madrid y Barcelona y de las Islas.
La autora del libro 'Dios usa lápiz labial', que ayer fue adquirido por buena parte del público asistente a la conferencia, ofrece en su obra consejos prácticos sobre cómo vivir una vida más llena de paz y amor.
La líder espiritual explicó, durante la conferencia organizada por el Club Solo para Mujeres (SPM) que dirige Kettylin Magnusson, + Q Events, KRM Producción y Organización de Eventos y The Kabbalah Centre, contando con la colaboración de Ultima Hora, que «todos venimos a este mundo con algo que hemos hecho en otras vidas», apuntó la conferenciante.
«La cábala enseña que por naturaleza todos somos receptores y dadores, somos vasijas llenas de tanta luz como podamos contener», explicó Berg y añadió que «para realizar el propósito de la creación debemos reunir la luz y la vasija mediante la búsqueda de un equilibrio y armonía en nuestro interior, creando así una unidad entre nosotros y los demás, entre nosotros y el creador».
«Sólo cuando te preocupas verdaderamente por las necesidades de los demás, puede el creador ocuparse de tus propias necesidades», apuntó Berg.
«La gente ignora que todas las almas que habitan en el mundo están en condiciones de conseguir el éxito en sus vidas», puntualizó la cabalista y añadió que venimos a este mundo para dar, para aprender y para ayudar a los demás, «ayudando a los demás somos mejores personas», concretó.
«La Cábala te da herramientas para ser una mejor persona. Nosotros no cambiamos la fe de la gente, sólo intentamos que quienes llegan a nosotros entiendan el mundo y se relacionen con él de manera mejor», concluyó Berg entre grandes aplausos.