Palma comienza a ser mayor de edad (asume las competencias urbanísticas) y recupera su apellido (de Mallorca). Así, calificó ayer el diputado del PP Óscar Fidalgo la aprobación en el Parlament de tramitar la modificación de la Ley de Capitalidad de Palma, con el voto a favor de los 33 diputados populares y en contra de los 23 de la oposición. Ahora se abre un plazo de 15 días para presentar enmiendas, posteriormente tendrán lugar la ponencia y la comisión parlamentaria; se calcula que el próximo mes de junio esté totalmente aprobada. El alcalde de Palma, Mateo Isern, destacó durante su intervención en el pleno que la citada modificación permitirá a la capital balear recuperar las competencias que le posibilitaban realizar expropiaciones por tasación conjunta y aprobar la revisión del planeamiento; por lo que el alcalde señaló que Ciutat podrá adaptar su Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) al Plan territorial de Mallorca (PTM), tras seis años intentándolo.
Crecimiento urbanístico
Sin embargo, el diputado socialista Jaume Carbonero aseguró que el PGOU de Palma no se ha podido adaptar porque excede en un 10% el crecimiento urbanístico permitido en el PTM. En este sentido, advirtió al PP que no intente aprovechar la recuperación de las competencias para incrementar el crecimiento de Ciutat. Además, reprochó que Balears sería la única Comunitat del Estado cuya capital puede aprobar el PGOU sin el visto bueno de una institución supramunicipal (el informe no es vinculante).
El diputado del PSM-IV-Entesa, Antoni Alorda, aseguró que «no le daría tanta solemnidad» a la modificación de la Ley de Capitalidad, ya que únicamente trata dos puntos muy concretos, y «el urbanismo, ya lo saben, es un tema de Delgado (conseller de Turisme)».
Isern reiteró que en el pleno de Cort la propuesta de recuperar las competencias urbanísticas fue aprobada por mayoría absoluta y sin ningún voto en contra, ya que la oposición se abstuvo. Fidalgo reprochó al PSOE y al PSM-IV-Entesa que ayer votasen en contra en el Parlament. Sin embargo, la portavoz del PSOE en Cort, Aina Calvo, aclaró que los grupos de la oposición en el Ajuntament se abstuvieron porque el gobierno municipal se comprometió a revisar el papel del Consell, pero no se llegó a ningún acuerdo. Calvo recordó que la Ley de Capitalidad aprobada en 2006 contemplaba una comisión bilateral y que el informe de la institución insular era vinculante; la modificación actual no los prevé.
Cambio de nombre
Respecto al cambio de nombre, el alcalde argumentó que Palma de Mallorca es más adecuado para favorecer al turismo; al tiempo que vaticinó que convivirá con la denominación más popular de Palma. Fidalgo justificó que el cambio de nombre se realizó en 2008 sin la aprobación del pleno de Cort y recordó que un informe del secretarío municipal dice que es inconstitucional; así como que el Supremo sostiene que no puede cambiarse el nombre en contra del ayuntamiento.
Por el contrario, la oposición señaló que en el Estatut d'Autonomía de Balears, la Ley de Normalización Lingüística y el registro de las entidades locales, entre otros, denominan Palma a la capital balear; así como que expertos consultados aseguran que no existen razones históricas ni científicas que justifiquen el cambio. Alorda añadió que las competencias para cambiar los topónimos las tiene el Consell y que es necesaria una mayoría de dos tercios.