Más de 200 personas participaron ayer en Palma en una marcha con antorchas desde sa Feixina hasta el cementerio como acto de homenaje a Emili Darder, alcalde de Palma republicano, asesinado por cuatro falangistas hace 75 años. La marcha reivindicó la vigencia de los valores republicanos de Darder en el aniversario de su muerte.
En el manifiesto que se leyó al término de la marcha, los convocantes denunciaron que, 75 años después de los asesinatos, Balears sigue viviendo «bajo el yugo del españolismo» con retrocesos en derechos como el del aborto, ataques a la lengua y la puesta en marcha de planes educativos. Consideran que estas decisiones constituyen «el mismo corpus ideológico del franquismo», sin violencia física, «pero con el mismo odio reaccionario y españolista».
El manifiesto recordó a los políticos asesinados y a aquellos ciudadanos de las Islas «que perdieron la vida, partieron al exilio o que aún permanecen en las cunetas de las carreteras o perdidos en fosas comunes». El manifiesto señala que las heridas siguen abiertas mientras los asesinatos continúen «impunes».
Más homenajes
Antes de la marcha, la fundación Emili Darder también quiso homenajear al alcalde de Palma, con un acto en el lugar del cementerio donde fue asesinado. El presidente de la Fundación, Antoni Marimon, reivindicó la figura del alcalde republicano y su papel activo en la generalización de una sanidad y una educación públicas.
El PSIB, por su parte, también asistió a un acto de homenaje en el cementerio para recordar la figura del diputado socialista Alexandre Jaume, asesinado el mismo día que Emili Darder. El acto asistieron Cosme Bonet y Vicenç Thomàs, entre otros dirigentes.