El Govern autorizó ayer a la Abogacía de la Comunitat Autònoma a emprender las acciones legales que considere oportunas contra el secretario general de la UGT Balears, Lorenzo Bravo, por haber llamado «fascista» al president José Ramón Bauzá.
El portavoz del Ejecutivo, Rafael Bosch, informó ayer de ésta decisión del Consell de Govern de ayer y defendió la libertad «máxima» de expresión de todas las instituciones y organizaciones sociales, pero dijo que los insultos son «inaceptables», más aun si son contra el president de la Comunitat.
«Una cosa es decir esto es un abuso, esto no hay derecho...y otra es insultar al president de la Comunitat Autònoma», dijo Bosch tras la reunión del Consell de Govern.
También aclaró que la Abogacía estudiará las posibles medidas que pueda adoptar solo contra Bravo por haber faltado el respeto al mandatario balear, y en ningún caso contra el sindicato que lidera, la UGT.
Bravo
Por su parte el secretario general de UGT en Balears, Lorenzo Bravo, afirmó ayer que «a lo mejor podía haberle llamado «autoritario», en lugar de «fascista», al presidente del Govern, José Ramón Bauzá, a quien pidió que se disculpe primero.
«Si las disculpas son recíprocas yo no tengo ningún problema. Él (Bauzá) se pasó en esa palabra (al decir que los agentes sociales quieren ‘seguir poniendo la mano'), a lo mejor yo le contesté demasiado exagerado», admitió Bravo , pero insistió en que el president del Govern «se ha pasado dos veces» con los sindicatos.